HIMNOS ÓRFICOS

Los himnos órficos, dirigidos cada uno a una
divinidad particular del panteón grecorromano,
constituían un libro de oraciones empleado
en sociedades religiosas paganas que
practicaban los misterios y cuyo santo patrón
era Orfeo, una de las figuras más prestigiosas
y enigmáticas de la antigüedad.

INTRODUCCIÓN A LOS HIMNOS ÓRFICOS
Naturaleza de los Himnos
Al ofrecer a los lectores esta versión y comentarios de
HIMNOS ORFICos, estamos convencidas
de que, con ello, prestamos un destacado servicio a las
aportaciones de la lírica eterna, contribuyendo además, en una
forma más directa, a la exégesis del mito a la luz de lo que
terismo de la primitiva religión
primera mano de los griega.

Los HIMNOS ÓRFICOS son versos antiquísimos. Nacieron,
según autorizadas opiniones, en dialecto grecofrigio,
que era el consagrado al λογος (logos) o palabra sagrada. Es
posible que en esta forma llegaran a convertirse en los
himnos sagrados que perduraron en el seno del Santuario de
Eleusis. Sin embargo, se halla más cercana a la lógica la
posibilidad de que, precediendo los HIMNOS a las definiciones
dialectales de la lengua griega, se hubieran escrito en el
todavía tosco, pero eminentemente lírico, idioma pelásgico,
que es el que emplearon, durante la protohistoria helénica
los pueblos dorios del norte, que fueron, sin duda, los primeros
pobladores de Tracia, de Macedonia y del Epiro legendarios.

El griego primitivo ofrecía el verso medio en hexámetros,
o sea, que se recitaba acentuando, en el canto llano, las seis
sílabas fonéticas que constituían la medida de cada verso.
Tan dulce y armonioso era el hexámetro griego, que dice de
él Burckhardt -hablando de los orígenes de la épica
grecooriental- que, incluso sin cítara o lira, era ya de por sí canto
maravilloso.

El hexámetro fue, pues, durante muchísimos siglos, el
eufónico recipiente de la poesía sagrada y de la poesía
profana. Parece ser que esa forma perfecta del verso griego emanó
de la promántida -la primera pitia- del oráculo de Delfos, y
se consideraba dictado por el propio Dios.

Esos HIMNOS se recitaban, dentro de la estructura del
ritual sagrado, en canto llano y forma coral, combinando las
voces acompañadas de la lira de siete cuerdas que daba el...