João Guimarães Rosa (1908–1967)

Uma das obras fundamentais da literatura brasileira, em nova edição.

Publicado originalmente em 1956, Grande sertão: veredas, de João Guimarães Rosa, revolucionou o cânone brasileiro e segue despertando o interesse de renovadas gerações de leitores. Ao atribuir ao sertão mineiro sua dimensão universal, a obra é um mergulho profundo na alma humana, capaz de retratar o amor, o sofrimento, a força, a violência e a alegria.
Esta nova edição conta com novo estabelecimento de texto, cronologia ilustrada, indicações de leituras e célebres textos publicados sobre o romance, incluindo um breve recorte da correspondência entre Clarice Lispector e Fernando Sabino e escritos de Roberto Schwarz, Walnice Nogueira Galvão, Benedito Nunes, Davi Arrigucci Jr. e Silviano Santiago. Dispostos cronologicamente, os ensaios procuram dar a ver, ao menos em parte, como se constituiu essa trama de leituras.
A capa do volume é reprodução da adaptação em bordado do avesso do Manto da apresentação, do artista Arthur Bispo do Rosário, com nomes dos personagens de Grande sertão: veredas. O projeto gráfico conta ainda com desenhos originais de Poty Lazzarotto, que ilustrou as primeiras edições do livro.

A edição limitada com tira de tecido esgotou. Os exemplares de Grande Sertão: veredas acompanham uma cinta vermelha de papel. A imagem do bordado na capa pode ter pequenas variações.… (lisätietoja)

"Gran Sertón: Veredas" se publicó en Brasil en 1956, transformándose en un clásico instantáneo y al mismo tiempo indefinible. En palabras de su autor “es tanto una novela como un largo poema”. João Guimarães Rosa ya era considerado uno de los autores más originales de la literatura brasileña después de la edición de los relatos de "Sagarana", en 1946 (publicado por primera vez en castellano en 2007 por Adriana Hidalgo editora), pero con la aparición de "Gran Sertón" se convirtió en uno de los escritores brasileños más conocidos universalmente. Novela cuyo escenario es el sertón –un área geográfica situada al nordeste del Brasil que figura en la literatura brasileña como una concepción de la identidad nacional–, la trama está constituida por un largo e ininterrumpido monólogo que el yagunzo Riobaldo le relata a un médico urbano. Se trata de un yagunzo (“un valentón asalariado que está ligado a la idea de prestación de servicios, típica en las disputas grupales o familiares” según Antonio Cándido) que durante una etapa de su vida fue maestro. Su condición de maestro torna verosímil un monólogo cargado de citas, referencias y ecos de la literatura universal: desde el infierno dantesco a la urbs joyceana, pasando por la leyenda de Fausto y la literatura de caballería. Con este monólogo, Guimarães Rosa evocó una realidad particular, de una forma tan minuciosa y exhaustiva que –por la radicalidad de su lenguaje– logró anular el pintoresquismo alcanzando reverberaciones universales. Y al mismo tiempo resulta ineludible en toda discusión sobre la literatura latinoamericana que articule aspiraciones experimentales y la definición de una identidad regional. La mejor caracterización del sertón de Rosa la da el propio Riobaldo: “Sertón es el mundo”. Poco tiempo después de ser publica… (lisätietoja)